DREAMS OF A BROKEN LIFE
miércoles, 4 de mayo de 2011
hora que se acerca la noche,
que la luz primera del amanecer
va envejeciendo como todo en esta vida,
y ahora que el cielo de celestes y rosas
va oscureciéndose y tomando un color terciopelo,
ahora, amor mío, ahora, es cuando vienen mis [miedos.
No quiero ir a dormir
porque no tengo el abrigo de tus brazos,
porque las pesadillas me acosan
en cuanto cierro mis párpados.
Y no quiero quedarme despierta
porque entonces los tormentos son como diablos
y me vienen a la mente, traicioneros,
los celos al pensarte en otros labios.
Y son como alfileres que se clavan
y todo se me vuelve rojo de rabia
y en esas horas creo que te odio tanto
como sé que en realidad te amo.
Voy a volverme loca de demonios encelados,
voy a perder el juicio por estos sentimientos.
Que no soy como ella,
que no puedo, quizás, darte tanto,
sólo entonces me pregunto por qué me has [enamorado.
Que te odio tanto en esos momentos
como sé que en realidad te amo,
que me odio tanto a mí misma,
a la vida, por lo tarde que ha llegado.
Dime qué puedo hacer cuando esto es tortura,
cuando no puedo dormir
ni quedarme en estado de desvelo.
Dime qué puedo hacer cuando estas uñas
me desgarran el alma tan herida
y qué puedo hacer
cuando me asolan el odio y la envidia.
Dime qué hago
para luchar contra mis pesadillas,
contra esos celos que si no entran en mis sueños,
entran en mi vigilia.
Dime, amor mío,
por qué me has enamorado
si no vas a abrazarme cada noche
en el calor de tus brazos.
¿Por qué me has enamorado,
si no vas a compartir conmigo
los pesares y alegrías
y las cosas sencillas que se hacen a diario?
Créeme cuando te digo que te amo,
que eres para mí el mayor tesoro,
que nada más importa si te tengo a mi lado,
que eres todo lo que mi corazón ansía.
Créeme cuando te digo
que cuando te marchas te llevas mi vida,
que todas mis calles se vuelven oscuras,
que se me rompe el corazón con los celos y las dudas.
No importa lo que pase,
sabes que me tienes aquí,
que mis brazos están abiertos
para cuando quieras venir a mí.
Pero no puedo evitar
que me mate esta locura,
que mi corazón grite en silencio
y mi dolor me lleve a la tumba.
Que no ser yo la que duerma en tus brazos,
la que bese tu piel y roce tus labios,
no ser yo la que esta noche te oiga respirar
y sienta el calor de tu cuerpo a mi lado...
eso es lo que destroza mi corazón enamorado.
Pero créeme cuando te digo que te amo,
que eres para mí el mayor tesoro,
que nada más importa si te tengo a mi lado,
que eres todo lo que mi corazón ansía.
Pero créeme cuando te digo
que no importa lo que pase,
que sabes que estaré aquí,
que mis brazos estarán abiertos
cuando quieras venir a mí.
Créeme cuando te digo
que cuando te marchas te llevas mi vida,
créeme cuando te digo
que no quiero caminar caminos de rosas con otro,
mientras contigo pueda caminar caminos de espinas.
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